¿Alguna vez has experimentado dolor de oído después de un refrescante baño en la piscina? Las infecciones de oído por nadar en piscinas son más comunes de lo que te imaginas, estas pueden ser causadas por bacterias e incluso hongos en el agua.
En esta publicación, aprenderás todo lo que necesitas saber para evitar una infección de oído por piscina, así podrás seguir disfrutando del sol y el agua con tranquilidad ¡Acompáñanos!
¿Nadar en piscina causa infecciones?
Las piscinas pueden ser un caldo de cultivo para bacterias y hongos, especialmente si no se limpian adecuadamente o están demasiado llenas. Los nadadores pueden contraer infecciones de oído, también conocidas como otitis externa, cuando el agua infectada entra en contacto con el canal auditivo externo.
Tipos de infecciones de oído por piscina
Entre los tipos de infecciones de oído que pueden ser causadas por nadar en piscinas se encuentran:
Otitis externa
También conocida como “oído de nadador”, es la infección del canal auditivo externo más común. Puede ser causada por bacterias y hongos, incluyendo dentro de sus síntomas: dolor de oído, picazón, enrojecimiento e inflamación.
Otitis media
Es una infección del oído medio, el cual se ubica detrás del tímpano. Aunque no suele estar relacionada directamente con nadar en piscinas, puede ser causada por una infección bacteriana o viral, que resulta mucho más frecuente después de que la persona haya sufrido una infección del oído externo previa.
Síntomas
Los síntomas relacionados a una infección de oído por piscina son:
Dolor de oído.
Picazón interna.
Enrojecimiento.
Inflamación en el canal auditivo externo.
Sensación de oído tapado.
Secreción del oído.
Disminución de la audición.
Fiebre (en casos más graves).
Causas
La infección de oído por piscina ocurre principalmente por la exposición al agua contaminada con bacterias y hongos en el canal auditivo externo durante la natación. Los microorganismos pueden entrar en los oídos a través del agua que se acumula en los canales auditivos externos al nadar o incluso al sumergirse en la piscina.
Adicionalmente, la falta de mantenimiento y la limpieza inadecuada de las piscinas también puede contribuir a la proliferación de bacterias y hongos, lo que aumenta el riesgo de infección auditiva en los nadadores.
¿Qué hacer frente a un síntoma?
Si aparecen síntomas de una infección de oído por piscina, es importante tomar medidas inmediatas para recibir el tratamiento adecuado y prevenir complicaciones. Esto involucra buscar atención médica de un profesional en otorrinolaringología para que evalúe los síntomas y determine el mejor curso de acción.
Es posible que se necesite tratamiento con medicamentos para aliviar el dolor y combatir la infección, así como evitar nadar o sumergirse en agua durante un cierto período de tiempo.
Es importante mencionar que se deben evitar remedios caseros como, por ejemplo: la inserción de objetos extraños en el oído, ya que esto puede empeorar la infección o causar daño permanente al canal auditivo.
¿Cómo evitar infecciones al nadar en piscinas?
Si deseas evitar infecciones al nadar en la piscina, toma en cuenta estos consejos:
No entres al agua si tienes diarrea o cualquier otra enfermedad contagiosa.
Toma una ducha antes y después de nadar.
Evita sumergir la cabeza en el agua o mantenerla bajo el agua durante mucho tiempo.
Usa tapones para los oídos o un gorro para nadar para prevenir la otitis externa.
Asegúrate de que la piscina esté limpia y bien mantenida, con niveles adecuados de cloro o bromo.
Lávate las manos con frecuencia, especialmente después de ir al baño o de cambiar pañales, así estarás aportando tu granito de arena en la limpieza de la piscina.
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