Los tapones para oídos proporcionan muchos beneficios, en especial como equipos de protección personal ante ruidos y perturbaciones que pudiesen afectar la buena salud del órgano auditivo.
¿Cuándo es saludable usar los tapones para oídos al viajar?
Sin duda, la protección del oído ante los sonidos fuertes, es una de las mejores formas de cuidar nuestros sentidos. El ruido forma parte de nuestra vida cotidiana y está presente en construcciones, conciertos, eventos deportivos, entre otros.
Por otro lado, cuando se trata de viajar, los tapones para oídos son esenciales; ya que en estos espacios se producen sonidos o zumbidos constantes que atacan de manera directa el oído.
De hecho, en la cabina de un avión se ha comprobado que el ruido puede alcanzar el nivel máximo que los oídos pueden captar antes que la audición se vea afectada (unos 85 decibeles).
Durante el despegue y luego en el aterrizaje, el ruido en la cabina de un avión alcanza hasta 105 decibeles; lo cual se estabiliza en unos 80 decibeles una vez alcanzada la altura de vuelo prevista.
En consecuencia, si el viaje es largo, lo más recomendable es que consideres usar protección en tus oídos.
¿Qué pasa si duermo con tapones en los oídos?
Básicamente, dormir con tapones de oído puede mejorar de manera significativa la calidad del sueño.
En particular, el uso de tapones para oídos a la hora de ir a la cama logra bloquear los sonidos mientras duermes; evitando interrupciones durante el sueño profundo.
Obviamente, cuando una persona despierta bruscamente, la pausa abrupta en la continuidad del descanso produce efectos duraderos (incluso si se trata tan solo de algunos segundos); ya que el cerebro necesita más tiempo para volver a retomar el sueño profundo.
Aunque algunas personas se preguntan si dormir con tapones de oído es malo o causará problemas en el futuro; lo cierto es que se trata de una práctica segura que puede arrastrar ciertos efectos secundarios, por ejemplo:
Los tapones para los oídos pueden empujar el cerumen hacia el interior del oído y al cabo de un tiempo, causar taponamiento. Esto a su vez causaría una pérdida temporal de la audición o Tinnitus.
También es probable que se desarrollen infecciones en los oídos, debido a la acumulación de cerumen o bacterias que se desarrollan en los tapones.
En resumen, ¿dormir con tapones de oído es malo?, la respuesta es no; pero deben emplearse todas las medidas sanitarias correspondientes para evitar posibles consecuencias.
¿De qué materiales debería usar los tapones de oídos?
Cuando de tapones para oídos se trata, existen dos grupos principales:
Los tapones ventilados que tiene un pequeño orificio que ayuda a regular la presión en el oído (usados por buzos y público en general para viajar en avión).
Los tapones no ventilados, que son los que más se usan a la hora de aislarnos y dormir profundamente.
Aun así, existen tapones para oídos de varios materiales, que son:
Espuma
Evidentemente, cuentan con la ventaja de ser los más económicos del mercado. Además, son suaves y, por lo tanto, muy populares a la hora de dormir.
No obstante, la porosidad de este material lo convierte en un gran cultivador de bacterias; por lo que se recomienda reemplazarlos con frecuencia.
Cera
Por su parte, estos tapones son fáciles de moldear al tamaño del pabellón auricular (oreja) y también resultan bastante cómodos.
Son los más buscados para dormir o nadar; y por tratarse de un material impermeable, controlan el exceso de humedad hacia el interior del oído.
Silicona
Los tapones de silicona dura son reutilizables, lo que se traduce en un gran beneficio para cuidar la economía del hogar. Sin embargo, no son exactamente los más recomendables para dormir por la incomodidad que producen.
En contraste, los tapones de silicona blanda funcionan de manera similar a los de cera y son mucho más cómodos y moldeables. No obstante, algunos estudios indican que no han demostrado un verdadero bloqueo del sonido que permita asegurar un sueño profundo.
¿Cómo usar tapones de oídos?
Usar tapones para oídos no es algo del otro mundo, pero existe una serie de normas y medidas preventivas de uso que debes conocer y poner en práctica:
Como premisa básica para la colocación de cualquier tapón para oídos, la limpieza de las manos te ayudará a evitar cualquier posible infección.
Por obvio que parezca, no debes romper, dividir o alterar de alguna forma el tapón. Su diseño está pensado para que no ocasione daños en el conducto auditivo y pueda retirarse con facilidad.
Para la inserción del tapón, es necesario tener una mano libre para estirar la oreja hacia arriba y hacia atrás; mientras con la otra introduces el tapón hasta que el dedo toque el área externa del conducto.
Si el tapón es de espuma, se recomienda enrollar de forma cilíndrica para hacerlo más delgado e introducirlo sin pliegues.
Se debe comprobar que al introducir un tapón en el oído no duela o moleste. En caso que esto ocurra debes retirarlo, reubicarlo y en caso de persistir el problema; colocar uno nuevo.
Para saber si el tapón quedó en su lugar, puedes apoyarte en un espejo y verificar que los extremos no se vean.
Para extraer los tapones de los oídos, se recomienda girarlo un poco y halarlo con suavidad.
Si sabes cómo usar tapones de oídos de la forma correcta, no vas a tener ningún tipo de problemas y puedes disfrutar de un descanso reparador.
