Sin lugar a dudas, en la actualidad la pérdida de olfato y gusto por COVID-19 se cuenta entre los principales síntomas que identifican un posible contagio del coronavirus (SARS-CoV-2); y aunque se trata de una característica bien particular, al no presentarse en todos los casos, su detección se vuelve algo imprecisa.
De la misma manera, esta enfermedad principalmente respiratoria produce otros síntomas como tos, fiebre, rinorrea, dificultad respiratoria, entre otros; e incluye anosmia y/o pérdida del gusto en casi el 90% de los pacientes.
Sin embargo, un gran número de casos (alrededor del 80% de ellos) consigue alcanzar la recuperación total de los sentidos de forma espontánea.
¿Cómo afecta el COVID-19 nuestro olfato?
Así como la pérdida del olfato puede ser parcial o total, no existe una receta única que incluya a todos los pacientes, ya que en cada caso el virus se comporta de forma diferente.
En primer lugar, se pueden mencionar los pacientes asintomáticos que no manifiestan este ni cualquier otro síntoma de la enfermedad. Luego se ubica un grupo en el cual existe una mayor sensibilidad a olores o percepción alterada de los mismos.
Por último, es probable que la pérdida del olfato sea el único síntoma que presente la persona o que se convierta en la sensación inicial antes de que ocurran otras manifestaciones del virus.
¿Existe algún tratamiento para recuperar el olfato en caso que no suceda de manera espontánea?
Las células que intervienen en el proceso olfatorio se regeneran de manera espontánea, lo cual hace mucho más probable volver a percibir olores en el corto tiempo, con una recuperación naturalmente rápida.
Sin embargo, ante casos complejos y pacientes que sufren un nivel de afectación mucho más severo; la terapia de rehabilitación (entrenamiento olfativo) es una nueva alternativa que viene arrojando excelentes resultados.
Para ello se presentan diferentes estímulos ante el paciente, el cual los reconocerá después de cierto tiempo recibiendo la terapia.
Por ejemplo, es probable que se presente una foto y una esencia de manera simultánea. En este caso, el cerebro por asociación comenzará a reconocer la imagen con la fragancia y la memoria olfativa se reactivará.
¿Cuáles son las alteraciones del gusto?
Por otro lado, la pérdida del gusto es quizá una de las sensaciones más desagradables que muchos experimentan durante su periodo de contagio e incluso en los casos más sensibles, hasta meses después de su recuperación pueden presentar secuelas.
Tan pronto como la persona se enferma, algunos refieren una pérdida total del gusto mientras que otros indican que les cambió de forma radical su manera de percibir los alimentos; haciendo que el sabor de las comidas se altere y generando inapetencia en personas sensibles.
De la misma manera, los cambios en las papilas gustativas vuelven a su total normalidad luego de algunas semanas; sin embargo al igual que ocurre con otros síntomas, debe hacerse un seguimiento médico para garantizar una evolución satisfactoria.
Finalmente, la pérdida de olfato y gusto por COVID-19 debe ser vista como una alerta temprana para ser estudiada por tu médico tratante y poder reconocer otros aspectos relacionados con la enfermedad.
Asimismo recuerda que en caso de sentir este u otro síntoma; debes evitar el contacto con otras personas, mantener el uso del tapabocas y tan pronto como sea posible, establecer control con tu médico de confianza para asegurar el tratamiento más conveniente a sus necesidades.